Un jud�o est� agonizando y le dice jadeante a su �nico hijo:
“Isaac, como estoy pr�ximo a morir, quiero que sepas que las siete casas, los tres edificios, los treinta taxis, la f�brica de telas, las dos fincas, las ocho tiendas… las joyas… los t�tulos valores… las esculturas…”
“S�, papi… �me los dejas?”
“Te los vendo baratos… baratos…”