La ricachona de la ciudad invita al doctor del pueblo a una recepci�n en su casa. �l asiste y, justo, le tuvo que tocar junto a una vieja preguntona.
“�As� que Ud. es el doctor Daniel!”
“Para servirle. Y espero que no”.
“He escuchado que Ud. ha trabajado en el hospital del barrio de la gente de mala muerte”.
“Y no le han mentido, se�ora”.
“�Por el lugar en el que est� situado y por la gente que lo rodea, muchos de sus casos deben ser por accidentes!”
“�Es probable, estoy en la sala de maternidad!”