Hab�a una gran fiesta en Los Pinos, y much�sima gente asisti�. Dos hombres charlaban entre los invitados, mientras uno de ellos pon�a su ‘objetivo en la mira’:
“Oye, �qui�n es esa chica?”, le pregunta uno al otro.
“No lo s�, �por qu� no vas con ella y averiguas?”
El sujeto se dirigi� a donde estaba la dama, y le pregunt� si quer�a bailar, a lo que ella responde:
“Mire, no puedo bailar por tres razones: primera, est� usted muy borracho; segunda, el Himno Nacional no se baila y, tercera, yo soy el Cardenal de Puebla”.